jueves, 18 de agosto de 2022

Circundando el rocío


La composición del tallo
descompone las líneas rectas
de tu pensamiento
con la espontánea lucidez que antes
creías cercana a tu piel. 

Las razones de la abeja
que te miró de frente,
con el crepúsculo a su espalda,
hicieron retroceder a las palmas de tus ojos
hasta aquellos primeros pétalos
de leche.

¿Acaso un pezón en vuelo,
confundido con un sol en celo,
pudo entonar,
con sagacidad, 
el mismo zumbido de miel lejana?

Ya perdiste las flores
y ningún perfume reencarna.
Pasemos a llorar
circundando el rocío
y brindando 
por nuestra memoria
que jamás floreció.

2 comentarios:

  1. Qué poema tan bonito y qué alegría leerte, amigo. Ahora que ya has roto el hielo, espero un torrente de palabras.

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    1. Gracias, amiga. "Torrente de palabras"... qué responsabilidad. Espero poder estar a la altura. Abrazos!

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